Estamos en tiempo de setas. Con la llegada de los meses de otoño y gracias a las lluvias, empiezan a poblar nuestros montes. Las setas son los frutos o la parte exterior de los hongos y se calcula que puede haber más de 500.000 especies de hongos.

Las setas se han consumido desde la antigüedad y ya por ejemplo en la civilización griega eran muy conscientes de sus propiedades y sus cualidades gastronómicas, algo que ha llegado a nuestros días. Asi Pastamanía nos ha querido recordar sus numerosas propiedades naturales en una época en la que son tan abuntantes y suelen asomarse con insistencia en nuestras mesas.

Debido a su elevado contenido en agua, presentan por contra un contenido bajo en grasas y a nivel calórico por lo que son ideales para formar parte de dietas de adelgazamiento pues son muy sabrosas, aún preparándolas de forma sencilla con salteadas con un poco de aceite o formando parte de ensaladas.

Por su parte contienen una sustancia que se transforma en vitanima D con lo que se favorece la absorción del calcio y el fósforo, elementos imprescindibles para nuestros huesos y dientes. No hay que olvidar que también poseen altos contenidos en otras vitaminas como la B y la C además de ser importantes fuentes de potasio y magnesio, por lo que su valor nutricional es muy alto.

Desde los tradicionales níscalos o 'esclatasangs' hasta los 'bolets de xop' pasando por los champiñones, los porcinis o boletus, las girgolas u orejones, las setas de cardo... múltiples opciones para cocinar de la forma más imaginativa y siempre con el buen sabor y el éxito asegurados.

No hay que olvidar, por último, como nos recuerda Pastamanía que también existen setas no comestibles con las que debemos ir con cuidado como la 'amanita muscaria', que pueden ocasionar iintoxicaciones, algunas muy graves.

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